La historia de Aguas Nuevas es breve. En el año 1939 el Ministerio de Agricultura, a través del Instituto Nacional de Colonización, aplicó una seria de medidas para distribuir las tierras en lotes que son adjudicados a nuevos propietarios o colonos, quienes, adiestrados por un Mayoral o Capataz del Instituto Nacional de Colonización y supervisados por un Perito Agrícola que reside en el mismo pueblo, se va a encargar de explotar la tierra.

 El Instituto Nacional de Colonización aporta las tierras, semillas, abono y maquinaria; el colono, su esfuerzo, dedicación y trabajo.

 Al cabo de los 5 años el colono puede convertirse en propietario de tierras, viviendas y demás dependencias con préstamos a bajos intereses y periodos de hasta 40 años para el pago.

El modelo arquitectónico y urbanístico del poblado se ciñe al proyecto de arquitectura modular de Vegaviana (Cáceres) y Cañada de Agra (Hellín) del arquitecto José Luís Fernández del Amo. Este modelo figura en varios manuales de Arquitectura y de Historia del Arte. El modelo urbanístico y arquitectónico de Aguas Nuevas es de los más originales del siglo XX. En sus líneas básicas, y aún en detalle, se pliega al modelo de arquitectura modular practicado en Vegaviana (Cáceres) por el arquitecto Fernández del Amo a instancias del Instituto Nacional de Colonización.

 

Así pues, Aguas Nuevas se forma como un pueblo eminentemente agrícola a mediados del sigo XX. Pero su mayor desarrollo ha sido en los años 1990 a 2000, cuando ha despegado como “ciudad dormitorio” de Albacete.

 En ello han influido:

 1.- La subida de los precios de la vivienda en Albacete, con incrementos de casi el 15% año tras año.

2.- La proximidad y fácil acceso de Aguas Nuevas a Albacete, en tan solo 5-10 minutos de coche.

Como resultado de este proceso que todavía persiste en estos días, muchos son los que han optado por comprarse una casa unifamiliar con terreno, y se desplazan habitualmente a la ciudad para el trabajo y hacer sus compras.

Hoy el carácter joven y emprendedor de muchos de nuestros vecinos se ve reflejado en la apertura de nuevos comercios, pequeñas industrias y establecimientos que, día a día, van haciendo de Aguas Nuevas un mejor lugar para vivir.